Un mar de cereales | A la salida de Castrojeriz hacemos dos tramos por carretera, primero hasta Castrillo Mota de Judíos y después hasta cruzar el río Pisuerga y entrar en la provincia de Palencia. Desde aquí el camino continúa por pistas de tierra en buen estado. El recorrido por la provincia de Palencia, atraviesa Tierra de Campos de este a oeste, con la visita a bellísimas poblaciones, cuajadas de historia y monumentos. El paisaje se hace llano, convirtiéndose en un mar de cereales dorados en el verano. A medida que nos aproximamos a Boadilla del Camino aumenta la presencia de arbolado, avanzamos por un recorrido que invita al disfrute protegidos y acompañados por álamos. Itero de la Vega nos recibe con su ermita de la Piedad del siglo XIII, con una escultura de Santiago Peregrino y su puente del siglo XI, uno de los más emblemáticos del Camino. Al pasar por Boadilla del Camino te recomendamos que no te pierdas su fantástico Rollo de Justicia, símbolo de la autonomía jurisdiccional que el pueblo poseía merced a un privilegio de Enrique IV, confirmado por los Reyes Católicos en 1482. Antes de llegar a Frómista, conectamos con el Canal de Castilla, uno de los proyectos más relevantes de ingeniería civil de la España Ilustrada, que nos ofrece, en un corto tramo, una impresionante sucesión de esclusas de gran atractivo. Puedes combinar tu itinerario con un pequeño recorrido por el Canal de Castilla de 4 kilómetros en el Barco Juan de Homar, desde Boadilla del Camino. La etapa finaliza en Frómista, pequeña localidad de gran interés monumental, con una joya clave del románico en el Camino de Santiago Francés, la Iglesia de San Martín. Un buen lugar para reponer fuerzas en sus establecimientos hosteleros.